Cada
vez más personas eligen comprar indumentaria, calzado y accesorios creados a
partir de la reutilización de descartes textiles, plásticos y caucho o
con elementos
naturales, como el bambú, y la implementación de tintes
naturales, y nuevas marcas dan respuesta a esa tendencia. Tanto
para consumidores como para diseñadores y fabricantes el objetivo es el mismo: reducir
el impacto ambiental.
“Es
momento de tomar conciencia de todo lo que hay detrás de cada nueva prenda o
accesorio que compramos”, dijo a TN Cecilia Falivene,
creadora de Ana Avila.
En
ese camino hacia la toma de conciencia, el
cambio de hábitos va ganando terreno dentro del mundo de la moda. No es fácil,
pero los diseñadores confían en que la respuesta la tendrán las
nuevas generaciones.
Además
de la reutilización
de materiales y la incorporación de tintes
y telas amigables con el medio ambiente, la mayoría de las
empresas crea lazos con la comunidad y apunta a dar respuesta a problemáticas
sociales e integrar personas excluidas del sistema.
En
muchos casos es un volver a tradiciones ancestrales y a
los orígenes de la humanidad, y retomar producciones no
industrializadas para centrarse en una propuesta artesanal.
Para Natalia
Orozco, de Alkimia Textil Ancestral,
se trata de “crear
un vínculo entre la vestimenta y la naturaleza, inspirándose en
las técnicas ancestrales de tintorería natural y estampación botánica para el
diseño artesanal de los textiles”.
“Es
una manera de producir una forma de vida: trabajar y consumir lo que
tenemos a nuestro alrededor, como lo hacían nuestros
originarios”, coincidió Luciana Baez, de Luma
Baez.
Las
palabras que definen son compartidas por la mayoría de los emprendimientos: economía
circular, suprareciclaje (convertir la basura en un
producto de valor), dejar un mensaje, inspirar, colaborar con
la comunidad en la que están emplazados.
El
mundo de la moda suele estar asociado a lo superficial. El solo hecho de que
haya una campaña nueva para cada temporada alimenta esa idea, pero muchas
marcas buscan diferenciarse y ofrecer opciones alternativas,
en donde la idea de reutilizar sea
parte del estar a la moda. A
Ana Avila: Busca recrear el uso
consciente de los recursos que se involucran en la cadena productiva de cada
prenda y de la “precariedad laboral de los trabajadores textiles”, para “cambiar
hábitos de consumo dañinos e injustos para el ambiente y las personas”,
explicó Cecilia. La propuesta es vintage. La firma rediseña
prendas heredadas y crea accesorios a
partir de indumentaria hecha con denim (mayormente jeans) para extender
su vida útil. IG: ana.avila.supra
Andar Origen: Realiza prendas y accesorios a partir de fibras
naturales (vegetales y animales). Se basa en el comercio justo, al
trabajo artesanal y el concepto de comunidad, priorizando la producción de cooperativas
o pequeños productores. Además, incorpora la propuesta de prendas
regulables, con una tabla de talles desde el 34 al 56. Su idea es fomentar
la moda inclusiva. Para evitar la utilización de metales y
plásticos, creó un sistema de tiras y nudos célticos regulables, y botones e
identidad de marca en impresión 3D biodegradable. IG: andarorigen
Mixtura Textiles: “Es el mdio de expresión y acción para manifestar inquietudes,
proponer y visibilizar las posibilidades que nos da el diseñar, hacer y
consumir de forma más consciente”, dijo su creadora, Gina
Fonticelli. La propuesta incluye tejidos y alfombras
artesanales producidas a partir de técnicas de tejeduría en telar
y tufting gun. La reutilización material se basa en piezas que
ponen el foco en los hilados reciclados y la tintorería
natural con residuos vegetales. IG: mixturatextiles
Proyecto Hattori: Produce marroquinería sobre la
base de plástico reciclado (bolsas de supermercado, de
regalería y de alimento balanceado; redes de verdulería; silobolsas; sachet de
leche; nylon envolvente, entre otros). Pero en el proceso utiliza también descartes
textiles y cámaras de bicicleta en desuso. “Hattori
es un proyecto que germinó en plena pandemia con la inquietud
de dar con soluciones sustentables a cuestiones concretas del campo del
diseño”, explicó Manuela Sosa, su creadora. Además, en la
ilustración que acompaña a cada diseño propone modelos de belleza no
hegemónicos. IG: hattori.ar
Alkimia Textil Ancestral: crea indumentaria femenina a
partir de técnicas ancestrales de tintorería natural y estampación
botánica para el diseño artesanal de los textiles. “Nuestro proceso
productivo es cuidadoso en la gestión de los recursos. No generamos desechos
textiles, trabajamos en alianza con cooperativas textiles locales
y pigmentamos a mano cada prenda para que vestir naturaleza
sea posible”, dijo Natalia. IG: alkimiatextilancestral
Silobag: Transforma
descartes industriales en ecoproductosdentro de la industria de la moda.
Incluye calzado, bolsos, mochilas, carteras, cartucheras hechos
con silobolsas. “Tomar como materia prima un material que ya existe
y fue descartado. Reinventarlo. Reutilizarlo, dándole una nueva vida.
Potenciando sus características al máximo y evitando el uso de materias
primas vírgenes que consumen recursos naturales”, explicó Cinthia
Fehling, directora creativa. IG: silobags
Carro: Guillermina
Balsells y Silvina Cannito, sus cofundadoras, crean accesorios de
acarreo (billeteras, monederos, mochilas, carteras, entre otros) realizados
con materiales no convencionales y recuperados. Tras dos años de investigación,
desarrollaron un nuevo material a partir de la termofusión de residuos
plásticos, al que llamaron Renet. “El universo de los descartes
industriales es nuestro combustible y la producción sustentable,
nuestro desafío como diseñadoras. Agregamos valor a materiales en desuso. Transformar
la basura en tesoros siempre ha sido nuestra divina obsesión”,
dijo Guillermina. IG: carro_efectos_portantes
Luma Baez: Ofrece indumentaria femenina en prendas sin distinción de estacionalidad; reutiliza
descarte textil y confecciona fibras naturales y materiales estampados
con técnicas de ecoprint. “Nuestra meta es transmitir, a través del
vestir, un mensaje de conciencia sobre las maneras de consumir y producir.
Trabajar con descartes textiles amplía nuestra concepción de materia prima,
nos concientiza sobre la contaminación que nos rodea y colabora en la
construcción de nuevas prácticas”, dijo Luciana, su creadora.
IG: lumabaez
Conciensus: La propuesta consiste en productos de marroquinería creados
a partir de la recuperación de materiales de distintas
industrias que van a ser descartados (telas, lonas, entre otros),
que son transformados en carteras, mochilas y billeteras nuevas.
Además, busca generar valor social, al trabajar con talleres compuestos
o liderados por mujeres. “El mundo necesita más mujeres conscientes de
su potencial y sus derechos. Los productos entrelazan historias de sus
materiales: historias de nuestra herencia marroquinera y de las mujeres del
taller que convierten esos insumos de descarte en algo nuevo”, aseguró Ana
Paula Ferrari, su fundadora. IG: conciensus
Kaiapuni: Fabrica mochilas y bolsos con bolsas de arpillera plástica,
banners, bolsas de polipropileno y retazos de madera, en talleres donde
trabajan costureras que necesitaban de una oportunidad
para insertarse en el mercado laboral. “Siempre me molestó el
consumo excesivo y el comprar-usar-tirar (economía lineal). Trabajando en el
campo vi cómo miles de bolsas llegaban, se usaban y se tiraban, y me decidí por
hacer mochilas con ese material para lograr que ingrese a una economía
circular (comprar-usar-reutilizar/reciclar). Así nació este gran proyecto”,
dijo Santiago Harriague, su creador. IG: kaiapuni.arg
Maleza: “La
sustentabilidad me llegó como una toma de conciencia, responsabilidad y
empatía. Cuando me propuse crear Maleza, decidí que quería trabajar
conforme a mis valores. Mi prioridad es crear productos que sean sustentables,
artesanales, veganos y que respeten y cuiden el planeta y a las
personas”, contó Florencia Agazzi, fundadora del emprendimiento.
Maleza ofrece accesorios y distintos productos teñidos y estampados con
tintes naturales, a partir de la reutilización de descartes orgánicos,
como cáscaras y carozos de palta; yerba; cáscaras de cebolla, y la poda de
flores y cortezas. IG: maleza.handmade
Nude and Furs: Mario Carabajal, su creador, ofrece ropa interior
masculina (slips, minibóxer y suspensores) confeccionada con retazos
de telas de jersey de algodón, que compra en el mercado de telas, pero
fundamentalmente en los cajones de retazos de descartes textiles. “Nació de la
necesidad propia de tener ropa interior de colores vibrantes. Surgió de
retazos de telas y pruebas de moldearía, convirtiéndose en un proyecto
sustentable. Es mi gran emprendimiento, que crece acompañado por amigos y
familiares que me impulsan a compartir mis creaciones”, dijo Mario. IG:
ndfs.2018
Lole®: Sole Muñoz, su creadora, empezó planchando bolsas plásticas en la cocina de su
casa, cuando tomó conciencia de la enorme cantidad de residuos
reutilizables que se generaban en su hogar. A prueba y error fue
combinando diferentes plásticos, y descubriendo cuáles se podían combinar y qué
grosores se podían lograr. “Hoy Lole®️ recupera miles de bolsas
plásticas de descarte por mes, bolsas que provienen de la donación de
particulares y de marcas (en su mayoría de indumentaria) que se comprometen con
sus residuos plásticos”, contó Sole, que a través de la técnica de
suprareciclaje, crea accesorios como totebags, koalas (riñoneras) y
billeteras, entro otros. IG: hola.lole
Bomba Florinda: “Prendas hechas con amor, por y para mujeres”, bajo
ese lema Edith Speciali, su fundadora, ofrece una gama de
artículos de lencería a partir de descartes textiles. IG:
bombaflorinda
Get Wild!: Ofrece más de 70 artículos (remeras,
musculosas, pantalones, ropa interior y medias), para mujeres, hombres,
niños y bebés, confeccionados con fibra natural de la caña de bambú. Cuenta
con el sello Bioproducto. La idea surgió cuando a la mamá de
Agostina, una de sus creadoras, le detectaron cáncer de mama, y la oncóloga le
recomendó un top hipoalergénico y sin costuras para hacer 35 sesiones de
radioterapia. Junto a Gabriela desarrollaron entonces productos para
pieles sensibles e hipersensibles, alergias, irritaciones, psoriasis o que
están atravesando algún tratamiento. IG: getwildar